¿La tecnología educativa sustituye la capacidad de pensar de los aprendices?

David Wiley plantea un escenario en el que la tecnología educativa podrá tomar decisiones inteligentes  y personalizadas sobre la mejor forma de aprender para cada alumno. Por ejemplo, habrá algoritmos que recomendarán contenidos en función del desempeño del alumno. Sin embargo, se pregunta Wiley, si esa capacidad de tomar decisiones, de organizar el propio proceso de aprendizaje y de reflexionar sobre la forma en que uno  aprende no es justamente aquello que se debería estar enseñando junto al contenido. Siendo así, la tecnología estaría sustituyendo la dimensión metacognitiva del aprendizaje. Interesante reflexión de Wiley a la que me gustaría añadir que hay un campo dentro del aprendizaje mediado por tecnología dedicado por entero diseñar procesos de aprendizaje cuyo objetivo es el desarrollo de las habilidades metacognitivas. Se trata del Aprendizaje Colaborativo Apoyado por Ordenadores.

Fuente: David Wiley: Agency and Opportunities for Future of Educational Technologies | Iterating toward Openness.

Metacognición, autoregulación y concienciación

La relación entre concienciación y autoregulación parece clara: si queremos dirigir un proceso consciente e intencional de aprendizaje el primer paso es la concienciación de ese proceso y de nuestro lugar, funciones y posibilidades. Esta entrada discute diversos modelos de metacognición y propone que la concienciación debe descomponer los diferentes procesos y subelementos que forman parte de la metacognición para trabajarlos por separado e integrarlos en un todo.

Fuente: John Draeger: Exploring the relationship between awareness, self-regulation, and metacognition | Improve with Metacognition.